• De acuerdo con datos de Tigo, durante 2022 se presentaron cerca de 2.000 hurtos de infraestructura de telecomunicaciones en Colombia.
  • Los actos de vandalismo contra las redes tuvieron un incremento de más del 46% respecto al 2021.
  • Según estimaciones de Tigo, por cuenta de los hurtos de infraestructura se perdieron más de 27.500 horas de servicio.
  • El diagnóstico de Tigo reveló que más de 293 mil hogares se vieron afectados en sus servicios de conectividad por cuenta del hurto y el vandalismo contra las redes.

El hurto de infraestructura y los actos de vandalismo contra las redes de telecomunicaciones siguen siendo un dolor de cabeza para los operadores, pero sobre todo para las familias colombianas. Según un estudio de Tigo, durante 2022 se presentaron cerca de 2.000 hurtos de infraestructura. En otras palabras, cada día se presentaron entre 4 y 6 robos de cable o baterías en el país.

A todo esto, se suman los actos vandálicos que también están en aumento. En algunos casos, los delincuentes en su afán de hurtar el cable de cobre, cortan los cables de fibra óptica generando altas afectaciones a clientes de hogares y corporativos.

Según datos de Tigo, en 2022 los actos de vandalismo crecieron más de 46% si se compara con los hechos ocurridos en 2021. Debido a que los servicios de conectividad son más que necesarios, cuando se presentan estos eventos de hurto los equipos especializados de Tigo y sus contratistas solucionan los inconvenientes en el menor tiempo posible.

“Debemos ser insistentes, todos podemos colaborar. Quizá muchos usuarios son escépticos frente a este flagelo, pero hacemos un llamado. Para hurtar elementos como cable de cobre se requiere solo de 10 ó 15 minutos. La invitación a nuestros usuarios, y a la comunidad en general, es que llamen a las autoridades cuando noten movimientos sospechosos alrededor de postes y gabinetes de telecomunicaciones”, resaltó Marcelo Cataldo.

Horas sin conexión

El hurto de infraestructura y los actos de vandalismo se traducen en horas sin conexión en los hogares y las empresas. Según datos recolectados por Tigo, durante 2022, se registraron más de 27.000 horas de desconexión por cuenta de este flagelo.

“El tema se agrava por lo reiterativo: nos hurtan y nosotros reponemos los materiales y en cuestión de horas, ya se registra otro hurto. Esta es una de las razones por las que los usuarios tienen interrupciones de servicio reiteradas”, explicó Marcelo Cataldo.

El mismo análisis reveló que más de 293.000 hogares se vieron afectados por la desconexión en su conectividad. “En 2022, tuvimos que invertir más de 1.500 millones de pesos para reponer cables o baterías que nos hurtaron para restablecer en el menor tiempo posible los servicios de nuestros usuarios”, destacó Marcelo Cataldo.